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Bushido

  

Bushido, literalmente traducido como "El Camino del Guerrero", se desarrollo en Japón entre las eras Heian y Tokugawa (S.IX-XII). Era un modo de vida y un código para el samurai, una clase de guerreros similar a los caballeros medievales de Europa.


Estaba influenciado por el Zen y el Confucionismo, dos diferentes escuelas de pensamiento de esos periodos. El Bushido pone el énfasis en "Lealtad, auto-sacrificio, justicia, sentido de la vergüenza, modales refinados, pureza, modestia, frugalidad, espíritu marcial, honor y afecto" .

El Bushido procede del Budismo, Zen, Confucionismo, y Sintoísmo. La combinación de esas 3 escuelas de pensamiento y religiones ha formado el código de los guerreros conocido como Bushido.

Del Budismo el Bushido toma la relación con el peligro y la muerte. El samurai no teme a la muerte ya que creen, tal como enseña el Budismo, que tras la muerte se reencarnaran y volverán a vivir otra vida en la tierra. Los samurais son guerreros desde el instante en que se transforman en samurais hasta el momento de su muerte, ellos no tienen miedo al peligro.

A través del Zen, una escuela del budismo, uno puede alcanzar el definitivo "absoluto".

La meditación Zen enseña como concentrarse y alcanzar un nivel de pensamiento que no puede ser explicado con palabras. El Zen enseña como "conocerse a si mismo" y no limitarte. El samurai utiliza esto para como una herramienta para desembarazarse del miedo, la inseguridad y finalmente los errores. Estas cosas podrían matarle.

El Sintoísmo, otra doctrina japonesa, da al Bushido su lealtad y patriotismo. El Sintoísmo incluye la veneración a los ancestros, lo cual hace a la Familia imperial la fuente de la nación. Esto da al Emperador una reverencia casi divina. El es la representación del Cielo en la Tierra. Con semejante lealtad, el samurai se compromete con el Emperador y a su Daimyo o señor feudal, samurai de mayor rango.

El Sintoísmo también proporciona la columna vertebral del patriotismo hacia su país, Japón. Ellos creen que la Tierra no esta para satisfacer sus necesidades, "es la residencia sagrada de los dioses, los espíritus de sus antecesores..." (Nitobe 14)

La Tierra es cuidada, protegida y alimentada por un intenso patriotismo.

El Confucionismo proporciona sus creencias en las relaciones con el mundo humano, su entorno y su familia. El Confucionismo da importancia a las 5 relaciones morales entre Maestro y Siervo, Padre e Hijo, Marido y Esposa, Hermanos mayor y menor, y Amigo y Amigo. Esto es lo que sigue el Samurai. Sin embargo el Samurai no esta de acuerdo con muchos de los escritos de Confucio. Ellos creen que el hombre no debe sentarse y pasarse todo el día leyendo libros, ni debería estar escribiendo poesías todo el día, un intelectual especialista era considerado como una maquina. En vez de eso el Bushido cree que el hombre y el universo fueron hechos para ser semejantes tanto en espíritu como ética.

Junto con esas virtudes, el Bushido también sigue con sumo respeto la Justicia, Benevolencia, Amor, Sinceridad, Honestidad, y auto-control.

La Justicia es uno de los principales factores en el código del Samurai. Caminos torcidos y acciones injustas son consideradas denigrantes e inhumanas.

Amor y Benevolencia eran virtudes supremas y actos dignos de un príncipe.

Los Samurais seguían un ceremonial especifico cada día de su vida, así como en la guerra.

Sinceridad y Honestidad eran tan valoradas como sus vidas. Bushi no ichi-gon o "La palabra de un samurai" trasciende un pacto de confianza y completa fe. Con dichos pactos no había necesidad de ponerlo por escrito.

El Samurai también necesitaba un completo auto-control y estoicismo para ser totalmente honroso. No mostraba signos de dolor o alegría. Soporta todo interiormente, nada de gemidos y lloros. Siempre mostraba un comportamiento calmado y una compostura mental que hacían que ninguna pasión de ningún tipo debería interponerse. El era un verdadero y completo guerrero.

Los factores que hicieron el Bushido son pocos y simples. Así de simple, el Bushido creo un modo de vida para mantener a una nación a través de sus tiempos mas problemáticos, a través de guerras civiles, desesperación e incertidumbre.

 

El Código de Bushido

Estos son los siete principios que rigen el código de Bushido, la guía moral de la mayoría de samurai de Rokugan. Sed fieles a él y vuestro honor crecerá. Rompedlo, y vuestro nombre será denostado por las generaciones venideras.

1. GI - Honradez y Justicia

Sé honrado en tus tratos con todo el mundo. Cree en la Justicia, pero no en la que emana de los demás, sino en la tuya propia.

Para un auténtico samurai no existen las tonalidades de gris en lo que se refiere a honradez y justicia.

Sólo existe lo correcto y lo incorrecto.

2. YU - Valor Heroico

Álzate sobre las masas de gente que temen actuar. Ocultarse como una tortuga en su caparazón no es vivir.

Un samurai debe tener valor heroico. Es absolutamente arriesgado. Es peligroso. Es vivir la vida de forma plena, completa, maravillosa. El coraje heroico no es ciego. Es inteligente y fuerte.

Reemplaza el miedo por el respeto y la precaución.

3. JIN - Compasión


Mediante el entrenamiento intenso el samurai se convierte en rápido y fuerte. No es como el resto de los hombres. Desarrolla un poder que debe ser usado en bien de todos.

Tiene compasión. Ayuda a sus compañeros en cualquier oportunidad. Si la oportunidad no surge, se sale de su camino para encontrarla.

  4. REI - Cortesía

Los samurai no tienen motivos para ser crueles. No necesitan demostrar su fuerza. Un samurai es cortés incluso con sus enemigos. Sin esta muestra directa de respeto no somos mejores que los animales.

Un samurai recibe respeto no solo por su fiereza en la batalla, sino también por su manera de tratar a los demás. La auténtica fuerza interior del samurai se vuelve evidente en tiempos de apuros.

5. MEYO - Honor

El Auténtico samurai solo tiene un juez de su propio honor, y es él mismo. Las decisiones que tomas y cómo las llevas a cabo son un reflejo de quien eres en realidad.

No puedes ocultarte de ti mismo.

6. MAKOTO - Sinceridad Absoluta

Cuando un samurai dice que hará algo, es como si ya estuviera hecho. Nada en esta tierra lo detendrá en la realización de lo que ha dicho que hará.

No ha de "dar su palabra." No ha de "prometer." El simple hecho de hablar ha puesto en movimiento el acto de hacer.

Hablar y Hacer son la misma acción.

7. CHUGO - Deber y Lealtad

Para el samurai, haber hecho o dicho "algo", significa que ese "algo" le pertenece. Es responsable de ello y de todas las consecuencias que le sigan.

Un samurai es intensamente leal a aquellos bajo su cuidado. Para aquellos de los que es responsable, permanece fieramente fiel.

Las palabras de un hombre son como sus huellas; puedes seguirlas donde quiera que él vaya.

Cuidado con el camino que sigues.  

 

Algunos comentarios de Mirumoto Jinto, Rikugunshokan del Clan del Dragón, sobre el código de Bushido:  

 

Sobre el valor:

El camino del valiente no sigue los pasos de la estupidez.

Sobre la lealtad:

Un perro sin amo vagabundea libre. El halcón de un Daimyo (Señor Feudal) vuela más alto.

Solo hay una lealtad superior a la del samurai hacia su Daimyo: la del Daimyo hacia sus súbditos.

Sobre el Respeto:

Un alma sin respeto es una morada en ruinas. Debe ser demolida para construir una nueva.

Sobre la Excelencia:

La perfección es una montaña inescalable que debe ser escalada a diario.

Sobre la Venganza:

La ofensa es como un buen haiku (Breve poema japonés de tres versos): puede ignorarse, desconocerse, perdonarse o borrarse, pero nunca puede ser olvidada.

Sobre la Espada:

Mi hoja es mi alma. Mi alma pertenece a mi Daimyo. Ultrajar mi hoja es afrentar a mi Daimyo.

Sobre el Honor:

La muerte no es eterna; el deshonor, sí.

Sobre la Muerte:

El samurai nace para morir. La muerte, pues, no es una maldición a evitar, sino el fin natural de toda vida.  

 

El Credo del Samurai  

 

No tengo parientes, Yo hago que la Tierra y el Cielo lo sean.

No tengo hogar, Yo hago que el Tan T'ien lo sea.

No tengo poder divino, Yo hago de la honestidad mi poder divino.

No tengo medios, Yo hago mis medios de la docilidad.

No tengo poder mágico, Yo hago de mi personalidad mi poder mágico.

No tengo cuerpo, Yo hago del estoicismo mi cuerpo.

No tengo ojos, Yo hago del relámpago mis ojos.

No tengo oídos, Yo hago de mi sensibilidad mis oídos.

No tengo extremidades, Yo hago de la rapidez mis extremidades.

No tengo leyes, Yo hago de mi auto-defensa mis leyes.

No tengo estrategia, Yo hago de lo correcto para matar y de lo correcto para restituir la vida mi estrategia.

No tengo ideas, Yo hago de tomar la oportunidad de antemano mis ideas.

No tengo milagros, Yo hago de las leyes correctas mis milagros.

No tengo principios, Yo hago de la adaptabilidad a todas las circunstancias mis principios.

No tengo tácticas, Yo hago del vacío y la plenitud mis tácticas.

No tengo talento, Yo hago que mi astucia sea mi talento.

No tengo amigos, Yo hago de mi mente mi amiga.

No tengo enemigos, Yo hago del descuido mi enemigo.

No tengo armadura, Yo hago de la benevolencia mi armadura.

No tengo castillo, Yo hago de mi mente inamovible mi castillo.

No tengo espada, Yo hago de mi No mente mi espada.

 

El Samurai y su uso del Bushido  

 

En Japón la clase guerrera era conocida como Samurais, también llamada Bushi. Formaron una clase durante los siglos IX y XII. Emergieron de las provincias de Japón para transformarse en la clase gobernante, hasta su declive y total abolición en 1876, durante la era Meiji.

Los samurais eran luchadores, expertos en las artes marciales. Tenían notable habilidad con el arco y la espada. También eran grandes jinetes.

Eran hombres que vivían siguiendo el Bushido; era su modo de vida. La lealtad total del samurai era para su Emperador y para su Daimyo. Eran honestos y de total confianza. Vivían vidas frugales, sin intereses en la riqueza y cosas materiales, pero con gran interés en el orgullo y honor. Eran hombres de valor verdadero. Los Samurais no temían a la muerte. Entablarían batalla sin importar cuales fueran las dificultades. Morir en la guerra reportaría honor a su familia y a su señor.

Los samurais preferían luchar solos, uno contra otro. En batalla un Samurai "invocaría" el nombre de su familia, Rango y hazañas. Entonces buscaría un oponente de similar rango y batallarían. Cuando el Samurai acaba con su oponente le decapita, para así tras la batalla retornar con las cabezas de los oponentes vencidos que acreditan así su victoria. Las cabezas de los generales y aquellos con alto rango eran transportadas de vuelta a la capital y mostradas en las celebraciones y similares.

La única salida para un Samurai derrotado era la muerte o el suicidio ritual: seppuku.

Seppuku, desentrañamiento también conocido como Hara-Kiri, es cuando un Samurai literalmente se saca las entrañas. Tras ese acto, otro samurai, usualmente un amigo o pariente, le corta la cabeza.

Esta forma de suicido era realizada bajo diferentes circunstancias "Para evitar la captura en batalla, captura que el samurai no consideraba deshonrosa y degradante, pero de mala política; para expiar un acto indigno o fechoría; y quizás mas interesantemente, para advertir a su Señor"(Varley 32)

Un Samurai preferiría matarse a si mismo antes que traer deshonor y desgracia al nombre de su familia y a su Señor. Esto era considerado un acto de verdadero honor.

Los samurais fueron la clase dominante durante 1400 y 1500. En 1600 era el tiempo de la unificación, las luchas en Japón habían cesado. Entonces, avanzado el final de la era Tokugawa, en los últimos 1700 Japón comenzó a moverse hacia una vida mas modernizada, mas "Occidental". Los samurais y su modo de vida fueron oficialmente abolidos en los primeros años de 1870.No había necesidad de hombres luchadores, de guerreros, de samurais.


20210904

Info fuente:INTERNET

 Resulta realmente difícil (y posiblemente polémico) anteponer unas artes marciales a otras.

Afirmar que una es mejor que otra no es correcto, pues no existen artes superiores a otras, sino que todas son simplemente diferentes, cada una con sus ventajas y sus limitaciones. Las artes marciales que se van  a exponer en este artículo posiblemente sean, las idóneas para aquellos que se acerquen a este mundillo exclusivamente para aprender a defenderse , aunque en muchos otros aspectos marciales, como los citados en la introducción, pueden resultar muy pobres . Es normal, pues se trata de artes marciales muy especializadas, enfocadas hacia el entrenamiento eficaz y realista, lo que exige sacrificar muchos otros aspectos.


Sin profundizar en este tema, se puede afirmar que la estética y la espectacularidad (patadas aéreas, saltos, giros, acrobacias y otros refinamientos) resultan muy a menudo poco compatibles con la eficacia. En cuanto a la competición, tampoco suele resultar muy compatible con el realismo marcial, pues en cualquier país civilizado existen férreos reglamentos que prohíben las técnicas más violentas y peligrosas y una serie de medidas para suavizar el combate (protectores, descansos, categorías por pesos, etc.).

Se puede calibrar si el arte marcial que practicamos resulta especialmente útil para desarrollar una buena defensa personal, observando una serie de criterios. Si por ejemplo en las clases se incluye a menudo combate con ropa de calle (calzado, pantalones o faldas ajustadas, abrigos, etc.), si se aprende defensa contra armas (cuchillos, palos, pero también jeringuillas), si se entrena la defensa contra varios atacantes. Otro criterio es que el entrenamiento sea bastante científico, en el sentido de que no se atenga a tradiciones y a normas rígidas, sino que sea abierto y experimente de manera re alista las diferentes situaciones de pelea.

Comenzaremos comentando aquellas artes marciales más conocidas que estén más enfocadas hacia la eficacia en combate real, y por lo tanto hacia la defensa personal.

Los deportes de contacto en general (boxeo inglés, full-contact, kick/thai-boxing, savate), aunque esencialmente orientados hacia la competición, suelen preparar mejor para la defensa personal que muchas artes tradicionales.

Para empezar, porque desde el primer día se acostumbra a los alumnos a combatir con semi -contacto o contacto pleno, y por lo tanto a enfrentarse a situaciones de pelea bastante reales. El combate es de hecho “el pan de cada día” de un practicante de contacto. Y también porque se desarrolla especialmente el arrojo y la agresividad, algo fundamental para hacer frente a un ataque real pues, como se dice, el combate psicológico es a menudo el decisivo. Entre todos los deportes de contacto, el thai boxing resulta particularmente eficaz para el combate callejero, al incluir en su entrenamiento diario low-kicks (patadas a las piernas), rodillazos y codazos.

Pero todos estos deportes presentan a cambio una serie de desventajas de cara a la defensa en la calle: nunca se entrena contra armas, desconocen la lucha en el suelo, y acostumbran a sus practicantes a una serie de reglas de combate nada realistas (protectores, descansos, igualdad de pesos, técnicas prohibidas). Y no olvidemos que en la calle todo vale…

El Hapkido, arte coreano creado a mediados de este siglo, es una curiosa mezcla de Taekwondo y Aikido y se centra especialmente en el trabajo de defensa personal. Lo más interesante de este arte es que incluye en su arsenal técnico golpes en casi todas las distancias, desde las patadas largas hasta las luxaciones y barridos. A pesar de su origen oriental, no es un arte tradicionalista, sino que enfoca la defensa personal desde un punto de vista bastante científico. Pero a diferencia de los deportes de contacto, el Hapkido enseña tal variedad técnica que exige más años de entrenamiento para resultar plenamente eficaz en la calle. Aún así, su aplicación práctica es bastante más  rápida que la de su “hermano mayor” el Aikido, el cual requiere de mucho tiempo para poder ser utilizado para la defensa callejera.

Una variante japonesa muy cercana a la estricta defensa personal es el Tai -Jitsu, pariente lejano del JiuJitsu y del Judo pero que junto a las luxaciones y combate en el suelo incluye numerosos golpes. Al contrario que las artes anteriores, la historia del Tai-Jitsu se pierde en el tiempo, e incluso se sospecha que está al origen de artes como el Jiu-Jitsu. Fue redescubierto y codificado en el siglo XVI por un samurái llamado Nagao y hablando de Jiu-Jitsu, el famoso estilo brasileño de la familia Gracie, tan de moda en estos últimos años, es también un arte marcial tremendamente realista y eficaz, como se está demostrando en los torneos sin reglas de “vale todo” . De hecho, este estilo ha logrado revalorizar las artes de lucha, hasta ahora un tanto menospreciadas por las artes de piespuños.

Los puntos fuertes del Gracie Jiu-Jitsu es el combate en el suelo, los derribos, luxaciones y estrangulaciones. Pero también es cierto que en la calle muy a menudo uno no puede llevar al suelo al atacante, especialmente si este va armado con arma blanca, si hay más de un agresor o si estamos en sitios como cabinas telefónicas, ascensores, escaleras, etc.

En cuanto al Kung-Fu, este término comprende tal cantidad de estilos, la mayoría desconocidos en nuestro país, que nos limitaremos a destacar el Wing Chun, especialmente útil para defenderse en la distancia corta frente a amenazas de cuchillo o agarres.

Existen también unas pocas prácticas marciales muy especializadas en el tema de defensa personal, algunas de ellas especialmente desarrolladas para los cuerpos policiales o del ejército. Vamos a comentar las más conocidas, aunque en nuestro país resulta muy difícil encontrar un sitio donde las enseñen.

Un buen ejemplo de arte marcial especializado en la defensa personal es el Kravmaga, sistema recientemente creado en Israel por Imy Lichtenfeld . Israel es un Estado fuertemente, militarizado, debido a su estratégica situación geográfica y a su agresiva política interior y exterior, por lo que no es de extrañar que surjan ahí estilos marciales básicamente centrados en la defensa personal y en la eficacia por encima de cualquier otra cosa. El Kravmaga es en realidad una especie de síntesis de las técnicas más expeditivas y eficaces del Kárate, Jiujitsu, Kick boxing y boxeo inglés.

Trabaja especialmente las técnicas de defensa personal contra arma blanca, pero también de manera importante contra armas de fuego, sin duda debido a la violenta situación que se vive en ese Estado. Este arte incluye numerosas luxaciones, estrangulaciones, codazos, cabezazos, ataques a los ojos y a los genitales, estrategias de engaño, etc. Todo vale para sobrevivir.

Otro sistema de defensa marcial es el famoso CloseCombat (término inglés que significa: “combate de cerca” o “combate cercano”), desarrollado por el ejército norteamericano para enseñar a sus tropas de élite a defenderse sin usar armas. El principal objetivo de este sistema es anular al adversario lo más rápidamente posible y corriendo los menores riesgos; para ello se hace uso de cualquier técnica y arma natural, sin límite alguno. También entrena de forma intensiva la defensa contra armas, tanto blancas como de fuego.

Mención aparte merece un arte marcial muy especial como el Jeet Kune Do (JKD) de Bruce Lee. Éste, más que un sistema compuesto de técnicas predeterminadas, es una forma de pensamiento, investigación y constante progreso marcial para que cada uno vaya descubriendo y adaptando aquello que más le conviene.

La única norma del JKD es que no hay normas, y sus únicas leyes son la eficacia, la simplicidad y la economía. En la actualidad los practicantes de JKD están investigando especialmente artes como el Kali filipino, el thai-boxing, el Pencak silat y el Gracie Jiujitsu.

Puesto que el JKD no se centra en técnicas, sino en conceptos y atributos, para la eficacia callejera destaca la rapidez, el timing, la intercepción, los engaños, el control de todas las distancias, etc.

Resumiendo: más allá de estilos y escuelas, lo importante son las personas. Con esto se quiere decir que, si bien se han repasado las artes más orientadas hacia la defensa personal, no es menos cierto que muchos maestros de los estilos no citados (Kárate, Taekwondo, etc.) se preocupan por formar a sus alumnos en una defensa personal realista. Por eso se atreve a asegurar que lo importante no son los estilos, si no los instructores y el enfoque que den a sus clases, que es lo verdaderamente trascendental.

Eric Jalain

INFORMAR DE ESTE ANUNCIHapkido
Publicado: julio 10, 2009 en Artes MarcialesHapkido
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El hapkido es un arte marcial que combina las técnicas de defensa personal con la lucha cuerpo a cuerpo, dentro de la más pura tradición marcialista coreana y japonesa. Aunque su origen es reciente, u efectividad en el combate, así como su elevado código ético, la han convertido en la favorita para los cuerpos militares de élite de las naciones unidas.

El Hapkido es un sistema de autodefensa coreano que se especializa en el combate cuerpo a cuerpo de larga, mediana o corta distancia. Para ello, utiliza una técnica que se basa en cuatro elementos fundamentales: un 80% en la inmovilización de las articulaciones, agarres, proyecciones y lanzamientos, además de golpes con los puños y los pies. Sin embargo, no es un sistema que se fundamente en la fuerza física del contendiente, sino más bien en aprovechar ciertos principios físicos como el balance, el equilibrio, las palancas, ángulos y trayectorias.

En realidad, esta disciplina es una conjunción de lo mejor de varias artes marciales, como el Aiki-Jujutsu japonés (que es la base del Aikido), así como las disciplinas coreanas del Tae Kyon (base del Tae Kwon Do), el Kuk Sul Won y la lucha Cireum. Esta fusión de técnicas convirtió al Hapkido no sólo en un excelente método de combate corporal, sino también en un promotor de valores éticos como la humildad, la perseverancia, la fidelidad, el compromiso y la superación personal.

Choi Yong Sul nació en la provincia coreana de Chung Chong, el 20 de julio de 1904. Cuando apenas contaba con cuatro años de edad, Corea sufrió la invasión de tropas japonesas que conquistaron al país y lo anexaron a su imperio. Por esta razón, la familia de Choi Yong fue deportada al Japón para servir como esclavos del poderoso y prestigiado Sokaku Takeda. Este personaje era descendiente de samuráis y maestro de la escuela artemarcialista Dayto Ryu, cuyos orígenes se remontaban al siglo XI después de nuestra era.

En ese lugar, Choi Yong observaba los entrenamientos que Takeda daba a sus alumnos sobre un arte marcial llamado Aiki-jitsu. Durante esa misma época el fundador del Aikido, Ueshiba Morihei, también estudió con Takeda. Sorprendido por la efectividad y destreza desplegada en los combates, pidió al maestro que le enseñara la técnica, pero para ser aceptado como alumno se le exigió que adoptara un nombre japonés y abandonara sus costumbres coreanas. Una vez que aceptó las condiciones, el nuevo aprendiz tuvo que trabajar muy duro para aprender todos los secretos del Aiki -jitsu, y con el paso de los años terminó por convertirse en el más avanzado alumno de la escuela.

Cuando murió Takeda en 1943, su puesto indudablemente era para Choi Yong, que apenas acababa de cumplir los treinta años. Continuó como maestro del Dayto Ryu tres .años más, pero a consecuencia del fin de la Segunda Guerra Mundial y de la derrota del Japón, todos los esclavos fueron liberados. Entonces Choi Yong decidió regresar a Corea y fundar su propia escuela de Aiki-jitsu en la ciudad de Seúl. Sin embargo, también se interesó por aprender las tradicionales artes marciales coreanas que empezaban a resurgir después de mucho tiempo de opresión y clandestinidad. Gracias a su férreo entrenamiento y disciplina, logró dominar con bastante rapidez el Tae Kyum, el Kuk Sul Won y el Cireum, la popular técnica luchística coreana.

Nascimiento del Hapkido

Una vez concluido su aprendizaje, Choi Yong se dio cuenta de que todos los sistemas eran muy parecidos entre sí, sobre todo por los ataques con la pierna y los golpes de puño. Entonces se dispuso a combinar las mejores técnicas de cada disciplina fusionándolas en una sola. El propósito era desarrollar un método de combate corporal muy superior al de las otras artes marciales. El resultado final fue el Hap-ki-do, nombre que le dio su creador y que significa en coreano “el camino de la unión de la energía”.

A partir de 1948, Choi Yong se dedicó a enseñar el nuevo arte en su escuela de Seúl, pero como carecía de influencias o ambiciones políticas, nunca pudo impulsarlo a nivel nacional y quedó a la sombra del Tae Kwon Do, técnica que también era de reciente aparición. No obstante, quien lograría llevar al Hapkido a la cumbre de las artes marciales coreanas, fue un alumno de Choi Yong que se había destacado desde un principio: Ji Han Jae. Este maestro mejoró algunos golpes de puño e incorporó llaves y derribos proveniente s de disciplinas  como el Aikido, el Karate y el Judo, también incorporó muchas técnicas coreanas tradicionales del taekyon y del hwarangdo, a partir de las cuales más tarde se formó la esencia del taekwondo. En 1959 fundó la escuela oficial y a partir de ese momento el Hapkido adquirió las características que se conservan hasta nuestros días. También logró difundir la disciplina en toda Corea cuando en 1961 fue contratado por el gobierno para adiestrar a las Fuerzas de Seguridad Presidencial, cargo que conservó hasta 1979.

Combate Actual

Hoy en día, el Hapkido y el Tae Kwon Do son las dos artes marciales coreanas más difundidas en todo el mundo. Sin embargo, mientras que el Tae Kwon Do se fue convirtiendo poco a poco en una disciplina deportiva que compite en los Juegos Olímpicos, el Hapkido se mantiene como un auténtico arte marcial. Esta es la razón por lo que fue adoptado como sistema de auto-defensa para los cuerpos militares de élite de las Naciones Unidas y en algunas de las divisiones de infantería y marina norteamericanas.

El maestro Choi Yong Sul murió en 1987, pero Ji Han Jae todavía vive y enseña en California, Estados Unidos.

En el Hapkido existen tres principios básicos: hwa (la no resistencia), won (el movimiento circular) y yu (el principio del agua). El hwa se refiere a estar relajado y utilizar la fuerza del oponente en contra de sí mismo. Won es el concepto de alcanzar el momento y la energía naturalmente, con un movimiento circular; mientras que yu, despliega la fuerza y la energía de la forma en que el agua fluye y refluye.

Gaelo Gutierrez R

El entrenamiento del Hapkido es enérgico y exigente. Una típica sesión incluye práctica de técnicas, ejercicios de piso, prácticas individuales de las formas, formas libres de lucha y ejercicios para desarrollar la energía interior. Se incluyen lanzamientos moderados o contundentes, y técnicas de inmovilización de articulaciones derivadas del Aikijutsu. El entrenamiento se realiza en un dojang.

El Hapkido se ha convertido en una de las artes marciales más populares del mundo. Es practicado con frecuencia por fuerzas militares y policiales, como parte del entrenamiento de defensa personal y, los estudiantes de taekwondo, a menudo aprenden Hapkido para complementar su currículo. Los instructores de taekwondo normalmente tienen algún grado de Hapkido.

Info

El Hapkido


El Hapkido es un arte marcial con origen en Corea del Sur enfocado a la defensa personal, más que un arte marcial la gente que lo practica lo considera una forma de vida. Lo podemos ver como un deporte con una disciplina más completa en comparación con el Taekwondo o Judo.

Este arte marcial aporta una gran seguridad, concentración y paz interior a quién lo practica, te inculca unos valores como el respeto, la humildad y un control de tu cuerpo. Se aplica contra todo tipo de ataques, amedrentamiento, puños, patadas, ataque con cuchillo o palo e incluso pistola.

El significado de la palabra Hapkido

La palabra HAPKIDO significa » el camino hacia la energía del mundo» al dividir esta palabra en sus tres sílabas nos origina:

  • Hap: armonía tanto contigo mismo como con lo que te rodea.
  • Ki: energía espiritual que llegamos a emitir.
  • Do: camino para lograr conseguir y dominar esa armonía y energía espiritual.

La técnica del Hapkido

El Hapkido dentro del mundo de las artes marciales se considera como un estilo blando ya que lo que se intenta aprovechar al dominarlo es interceptar la fuerza del adversario y utilizarla en su contra. Los ataques que normalmente realiza son para emitir el menor desgaste físico posible pero con una técnica desolladora que se centra en los puntos de presión del adversario y las articulaciones ya que es donde mas daño podemos ejercer.

Este arte marcial bien reciente que perfecciona sus técnicas desde aproximadamente 70 años ha ido incorporando y adaptando a su estilo técnicas de otros artes marciales como, Daitō-ryū Aiki-jūjutsu, llamado originalmente Daitō-ryū Jujutsu, del Kung Fu, el Judo y el Taekkyon.

Gracias a ello ha conseguido ser un arte marcial bastante completo con mas de 200 técnicas más sus variantes que logran preparar a una persona profesional en el ámbito de la defensa personal. Algunos de sus principios y técnicas se basan en:

 

  • Bloqueos
  • Proyección de los golpes y llaves
  • Luxaciones
  • Manejo de armas tradicionales
  • Caídas o Nakbop Shu
  • Ataques con las manos o Son Gong Kiok Shu
  • Patadas o Chagui

Cinturones dentro del Hapkido y sus significados

A partir de ascender al primer DAN la clasificación cambia y ya no se aplicaran colores sino que a su cinturón negro se le irán añadiendo rayas amarillas según vayan ascendiendo para convertirse en el gran maestro que son 9 rayas en total, se le otorga la décima raya solo a aquellas personas que hayan llevado una vida ejemplar.

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Si ya te dispusiste a buscar te habrás dado cuenta de que no hay cinturones específicos para el Hapkido por lo tanto valdrán los cinturones de otros artes marciales como el Kárate, Judo o Taekwondo.

La filosofía del Hapkido se basa en la energía, el espíritu y sigue tres principios básicos:

  • El Yu o el principio del agua: utilizar la fuerza del oponente y hacer que esa se vuelva en contra suya.
  • El Won o el principio del círculo: cada uno de nosotros tenemos nuestro espacio o círculo vital, hasta que el oponente no entre en ese círculo siempre se intentará evitar el conflicto.
  • El Wha o el principio de la armonía: a través de la armonía del cuerpo y la mente y gracias a ella lograremos perfeccionar y culminar nuestras técnicas.

Equipamiento o vestimenta del Hapkido

Principalmente el equipamiento básico de una persona que practica el Hapkido se divide en:

  • El Dobok, es el uniforme o traje que se utiliza para la práctica del Hapkido, se divide en dos partes, la chaqueta y el pantalón. Lo usual es verlos en color blanco o negro.
  • Cinturón, aparte de ser el complemento del equipamiento nos indica el rango y conocimientos de la persona.
  • Insignias, algo obligatorio ya que según la normativa se deben bordar en la parte superior izquierda de la chaqueta la bandera de Corea del Sur y en la derecha la federación a la que pertenece el alumno.

Aparte del equipamiento básico en el Hapkido también está permitido el uso de armas como:

  • Un palo corto llamado Dan Bong Sool.
  • Un palo medio llamado Joong Bong.
  • Un palo largo llamado Jang Bong Sool.
  • Una espada de madera llamada Kyeok Keom Sool.
  • Un bastón curvo o de anciano, también llamado Ji Pang Ji Sool.

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20210618

¿Qué es el Kobudo?

 

¿Qué es el Kobudo?

古  KO : ANTIGUO
武  BU : GUERRERO MARCIAL
道  DO : VIA / CAMINO 

Kobudo significa "antiguo camino/arte marcial" y estudia el uso de las armas tradicionales de las islas RyuKyu (Okinawa).

En sus orígenes, se encuentran los aldeanos de Okinawa quienes, en una época de dominación feudal, durante la era del clan Samurai Satsuma, tenían prohibido la posesión y uso de toda clase de armamento convencional. Llegado el momento de defenderse contra los invasores armados, tenían como opción usar las manos vacías (lo que hoy conocemos como Karate) y a su vez, desarrollaron armas basándose en los simples instrumentos de la vida cotidiana, como las herramientas agrícolas y de pesca. El manejo de estos instrumentos fue desarrollado en Okinawa con fines puramente defensivos.

Hasta el siglo XX, el Kobudo no era enseñado ni practicado en la isla como un arte marcial organizado. Cada instrumento era practicado en secreto por diferentes familias y pueblos. Un poblado agrícola podría usar preferentemente la tuifa (una herramienta de labranza) mientras que un grupo de pescadores tendría más dominio del eku (el remo de las barcas) y cada uno guardaba sus técnicas en secreto.

Si bien su arsenal lo componen distintas armas de diversos tamaños, su evolución está íntimamente ligada a la aplicación de técnicas de mano vacía (karate).


RyuKyu Kobudo Ryukonkai

琉球古武道琉混会

La Escuela Ryukonkai, fundada por el Hanshi Iha Kotado (10° Dan) se dedica a la práctica y la formación de distintas armas como el Bo, Sai, Tuifa, Nunchaku, Kama y Eku, porque considera el Kobudo como un arte marcial tradicional, herencia cultural de Okinawa, así como el Karate-Do.

El Sensei Iha insta a los estudiantes a dominar este arte por medio del entrenamiento persistente y con una formación rigurosa de un Kata tras otro. La belleza de los Kata del Budo se desarrolla en su nivel más alto de belleza y potencia, solo a través de la estabilidad y el movimiento suave de la parte inferior del cuerpo.

En los Katas de Karate y de Kobudo, es inevitablemente esencial para el Budo verlos desde una cierta perspectiva histórica. Hasta hace unos sesenta años, cada Maestro aprendía sólo un Kata, y lo llevaba a su pueblo y ahí lo enseñaba.

Debido a que esos maestros eran bastante ancianos y también en parte porque se dispersaron por toda la isla, resultaba difícil acceder a ellos y aprender sus katas. Sin embargo, finalmente fue posible compilar estos katas y su colección se convirtió en las bases de Ryukonkai.

Por esta razón la Escuela Ryukonkai le pide a todos sus miembros dedicarse en la formación y en el entrenamiento del Kobudo, especialmente para dar el mejor esfuerzo para recibir en forma adecuada los valores tradicionales del Budo y sobre todo buscar la mejor manera de transmitir este patrimonio a las generaciones futuras.